Tuning para principiantes

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Llamamos tuning a aquellas modificaciones, ya sea a nivel de mecánica o exclusivamente estéticas, que aplicamos a nuestros vehículos para mejorar su diseño y su rendimiento.

Esta personalización es una corriente muy extendida que tiene su origen, prácticamente, desde la fabricación de los primeros automóviles. Hoy queremos hacer un pequeño repaso al mundo del tuning para principiantes. Vamos a ello.

Los orígenes del tuning

Como decíamos, el tuning tiene su origen desde la fabricación misma del automóvil (el primer coche fue el ‘vehículo motorizado con motor de gasolina de tres ruedas’ patentado por Carl Benz el 29 de enero de 1886). Desde ese mismo instante la gente ha querido incorporar a los distintos diseños mejoras y personalizaciones que hicieran a los coches más rápidos, más eficientes o, simplemente, más llamativos.

Lo que no está tan claro es el origen físico del tuning. De hecho, existe una disputa entre los Estados Unidos y la vieja Europa (sobre todo en Alemania) por adjudicarse los primeros coches tuneados. Hoy en día, es una corriente totalmente expandida y que tiene a Estados Unidos y Japón como los principales países que lo practican.

Tuning: Modificar para mejorar

La esencia del tuning es la de incorporar mejoras o modificaciones para mejorar el rendimiento del vehículo. Vamos a repasar cuales son las principales áreas que suelen modificarse al tunear un vehículo:

  • Motor: Evidentemente, si lo que queremos es aumentar la potencia (el tuning y el mundo de las carreras van de la mano) la principal parte de nuestro coche que vamos a tunear será el mismo motor. Existe la opción de la sustitución total del motor por otro de mayor rendimiento, o de simplemente incorporar nuevos componentes como turbocompresores, filtros de aire o el sistema de refrigeración. La tendencia hoy en día, con una mayor presencia de vehículos eléctricos, es incorporar la electrónica y el software como principal cambio a nivel de motor.
  • Suspensión: La modificación de la suspensión afecta a muelles, amortiguadores y, en definitiva, a aquellos elementos de estabilidad del vehículo. Se juega así con el centro de gravedad buscando modificar el comportamiento del coche en las curvas o, como en el caso del todoterreno, aumentar la distancia respecto al suelo para poder circular por terrenos más extremos. Una de las modificaciones más populares es la de la suspensión hidráulica o mecánica que permite modificar la altura de cada rueda respecto al suelo por separado.
  • Carrocería: La belleza está en el exterior. El mundo del tuning no habría alcanzado las cuotas de popularidad que tiene si no hubiéramos podido ver en los anuncios, las revistas especializadas o las películas esos ‘coches mutantes’ con carrocerías de locura. Desde grandes alerones traseros para mejorar la aerodinámica, a embellecedores, luminosos de neón o llantas decorativas para los neumáticos, la estética es una de las principales cuestiones a mejorar para los amantes del tuning.

Estilos de tuning

Según las modificaciones que hagamos en nuestro vehículo estaremos hablando de un estilo de tuning u otro:

  • Sleeper: Cuando mejoramos las prestaciones del coche a nivel interno, pero no tocamos su exterior, ocultando dichas mejoras.
  • Barroco: Totalmente lo contrario al anterior. Cuando recargamos en exceso nuestro coche con elementos de tuning.
  • Hi-Tech: Aquí la modificación principal es a nivel tecnológica, optando por una decoración más minimalista y apostando todo a computadoras, pantallas y mejoras en el sistema de sonido.
  • Racer: Las mejoras para coches de carreras. Suelen presentar grandes alerones y rebajar el centro de gravedad para mejorar la estabilidad. La decoración suele ser llamativa y recargada.

Con esto ya tienes algunas nociones sobre el mundo del tuning por si quieres lanzarte a la piscina y personalizar tu coche. Ya sabes que en Desguace París puedes encontrar todas las piezas que necesites al mejor precio.