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Uno de los ejemplos más clarificantes de esto son los desguaces online, donde un servicio tan físico como era ir a un desguace a buscar una pieza de segunda mano para nuestro coche se ha convertido en una tarea sencilla que podemos realizar sin movernos de casa.
Las ventajas de comprar en un desguace online son varias: facilidad, rapidez, y ahorro. Con tan solo un par de clics estamos adquiriendo una pieza de segunda mano con todas las garantías de calidad y de seguridad en el pago.
El procedimiento para adquirir cualquier pieza a través de un desguace online es muy sencillo y similar a la dinámica a la que estamos acostumbrados en otros e-commerces. En primer lugar se busca la pieza que necesitamos o bien a través del buscador o mediante las diferentes categorías que nos ofrece la tienda online. Y una vez seleccionada la añadimos al “Carrito”.
Cuando nuestra compra está terminada especificamos la dirección y el método de envío, los datos de facturación y toda la información necesaria para que el pedido llegue correctamente a su destino. Después, simplemente nos quedará realizar el pago cómodamente sin movernos de nuestro sillón.
Pero, ¿Cómo hacen posible los desguaces online el pago a través de la web? Esta es una cuestión importante para los interesados en los servicios de estas empresas, ya que la seguridad de nuestras cuentas bancarias es una prioridad para nosotros, y por tanto para los comercios en cuestión.
Distintas formas de pago en desguaces online
Las formas de pago en la mayoría de los comercios, y en concreto los desguaces online son múltiples; esta variedad permite al establecimiento adaptarse a las necesidades concretas de cada cliente. Las más comunes son:
– TPV Virtual: es el más utilizado por los consumidores, y no tiene ningún coste para los mismos. Simplemente supone el pago inmediato a través de la tarjeta de crédito o débito al comercio a través de una pasarela de pago contratada al banco.
Existen dos modalidades en esta variedad: el pago directo y tradicional (simplemente introduciremos los datos de la tarjeta y el cobro se efectuará a nuestra cuenta automáticamente) y los TPVs 3D, en los que nuestra entidad bancaria nos solicitará una clave que previamente habremos activado para operar por Internet.
Habitualmente, las tarjetas que se permiten para esta operación son VISA, MasterCard, Maestro y American Express.
– Transferencia bancaria: esto consiste simplemente en un número de cuenta al que el cliente tiene que ingresar el importe de los productos a adquirir a través de una transferencia bancaria.
Aunque es una forma de pago usada por bastantes personas, ya que puede inspirar más seguridad a la hora de la compra, es la más lenta pues el banco tardará en cursar la transferencia e informar a la tienda. Además, también pueden añadirse comisiones por la transferencia dependiendo de los bancos que estén operando.
– PayPal: es una forma de pagar sin emplear directamente la tarjeta de crédito. Es el sistema de pago propiedad de eBay.
La forma de utilizar este medio también es muy sencilla, y pasa por el registro y asociación de nuestra cuenta bancaria a una cuenta en PayPal. Aunque este paso previo puede parecer un poco tedioso, después se convierte en una de las formas más rápidas y seguras de comprar a través de internet: ya que nuestros datos bancarios nunca podrán ser interceptados y solo hay que introducir los datos de la cuenta de PayPal para autorizar el pago.
