Radiador de coches, funcionamiento

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Su principal utilidad es la de eliminar calor de un elemento para evitar que se sobrecargue y pueda llegar a estropearse, así como la de poder calentar otro medio para de esta manera poder aprovechar el calor.

Cómo funciona un radiador de coche

Debido al calor que se produce en el coche con la combustión del carburante para que el coche pueda estar en funcionamiento es de vital importancia el eliminar este calor para evitar que determinados elementos del coche se sobrecarguen y se puedan llegar a romper. El cilindro del motor llega a alcanzar temperaturas tan elevadas que puede llegar a descomponer el lubricante y dejar de ejercer su función si no fuera por el sistema de refrigeración que permite enfriarlo.

Los cilindros están bañados por una corriente de agua que recogen el calor de estos y lo conduce hasta el radiador del coche en el cual es evacuado al aire libre.

Para que el radiador funcione correctamente es necesario echar la mezcla correcta de anticongelante y agua refrigerante, de esta manera conseguiremos que el motor funcione correctamente. Cuando se arranca el motor se ponen en funcionamiento los diferentes componentes refrigerantes del motor para que este no sufra sobrecargas y pueda llegar a romperse.

Una vez se pone en marcha el coche y los sistemas de refrigeración, el termostato se abre permitiendo que el líquido que ha pasado por los cilindros y han recogido el calor de estos circule hacía el radiador del coche con el fin de que este termine por eliminar este calor. El calor es absorbido gracias a la mezcla refrigerante que consiguen bajar las temperaturas y eliminar el exceso de calor.

Mantenimiento del radiador del coche

Al igual que los otros componentes del coche, el radiador de un vehículo necesita de un determinado mantenimiento, no obstante, este no requiere tanto esfuerzo ni ser tan constante como sucede con otras piezas. Salvo que se produzca algún fallo concreto, podemos hacer la revisión y limpieza del radiador prácticamente cada dos años.

Cuando nos vayamos a disponer a limpiar el radiador es muy importante que lo hagamos cuando el motor está frío, ya que si lo hacemos cuando el motor está caliente, por las diferencias de presión que se generan por las altas temperaturas del líquido del radiador del coche podemos sufrir algún accidente al abrir este.

Debemos de disponer y tener al alcance un recipiente de almacenaje adecuado ya que el líquido refrigerante es muy tóxico, por lo que no deberíamos tener contacto directo con él.

El radiador se vacía abriendo una llave que permite abrir el paso y que este se vacíe. Una vez vaciado, podemos inyectar agua directamente a través de una manguera hasta que veamos que el agua sale de color transparente. Una vez veamos que el radiador está limpio debemos proceder a cerrar la llave y rellenar de agua y líquido refrigerante.

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